Nuestra Creatividad frustrada

Cualquier ser de este planeta puede ser creativo. La creatividad o nuestra capacidad para crear es inherente a lo que somos. Si alguna vez has pensado de ti que no eres nada creativo, te recomiendo leer lo siguiente. En ocasiones esta capacidad la guardamos con frustración en una cajita oscura. Nos quedamos admirados contemplando la creatividad en los demás. Pero, ¡atento! Si lo puedes ver en otros, es porque ya está en ti, sólo tienes que descubrirlo.

La creatividad frustrada ocurre por una falta de conexión con nuestra alma y por una falta de LIBERTAD a la hora de enfrentarnos en nuestra vida a los obstáculos que nos encontramos por el camino. Como he mencionado anteriormente, la capacidad de crear es intrínseca a lo que somos. Entonces, ¿por qué es frustrada? Porque nosotros no nos damos el espacio pertinente para que esta capacidad se exprese, y además, todos tipos de condicionantes, como por ejemplo: el qué pensarán, que no podemos invadir terrenos que “no son nuestros”, que las cosas se tienen que hacer de una “determinada forma”, etc, etc. Es con toda esta argumentaría con la que NOS FRUSTRAMOS A NOSOTROS MISMOS.
Es sencillo, te lo aseguro. Dejo aquí un pequeño ejercicio de visualización para que pruebes por ti mismo si quieres:
Respira profundamente hasta que estés calmado. A continuación crea dentro de ti un espacio interior donde seas totalmente LIBRE. En este estado de libertad, pregúntate: ¿qué amaría crear en este determinado momento? Déjalo surgir y siéntelo, respíralo… Deja que tu imaginación te lleve… Luego anota todos los detalles de esta visualización sentida y observa cómo has reaccionado al respecto de lo imaginado.
¿Sigues en libertad? ¿Qué pensamientos tienes al respecto? ¿Es imposible realizar lo que has imaginado? ¿No te sientes c apaz? ¿Crees que se reirán de ti? ¿Ya lo hace mucha gente? O tal vez, ¿te encantaría hacerlo? ¿te da alegría? Etc.
Sea lo que sea que haya ocurrido durante este ejercicio, debes saber que todo lo que has recibido de vuelta eres tú mismo oponiéndote a tu creación a través de los pensamientos proyectados sobre otros o bien eres tú mismo apoyándote.
Nadie dijo que fuera fácil, pero sí que es posible, tenlo claro. Si te comprometes con darte el espacio necesario para ser feliz, necesitarás CREAR para nutrirte y desarrollar ciertas capacidades, algunas ya existentes y otras totalmente nuevas.
Cuando crees algo, piensa en cómo puedes aportar valor hacia otros también. No estamos obligados a compartir, pero crear algo y no compartirlo con otra persona es como privar a otros de que se puedan beneficiar de tus talentos y de que tú te puedas nutrir como consecuencia de ello. Este es el sentido de lo que para mí es la verdadera RIQUEZA: lo que creas y compartes sin esperar nada a cambio termina retornando a ti de forma que te nutre y te da FELICIDAD.
No te agobies ni te aflijas porque no salga al principio como te hubiera gustado. La práctica y la constancia son muy importantes en esto, puesto que siempre necesitarás tiempo para que salga una flor. Por otro lado, si te cuestionas qué puedes dar tú a los demás, estoy segura de que a lo largo de tu vida has desarrollado capacidades valiosas para ayudar a otras personas. Identifícalas y dales un camino para que lleguen a otros. COMPÁRTETE y llegará el momento en que no sepas hacer otra cosa que eso mismo: DAR CON AMOR LO QUE NACE DE TI.12179079_1169999313013482_225220140_n